Ecofagia

De Bestiario del Hypogripho
Forma de vida extraña invadiendo un bosque.
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Estas referencias a ℝ no deben confundirse con Omniversos ficticios. Las Ficciones del Bestiario son consideradas teóricamente independientes de nuestra realidad desde el Meta-verso.

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La ecofagia se refiere al proceso en el cual un organismo, conjunto de organismos o ecosistema ajeno degrada, reemplaza o destruye un ecosistema existente. Este proceso puede tener consecuencias negativas para la biodiversidad, el equilibrio ecológico y la sustentabilidad de un área determinada.

Etimología[editar]

Deriva del griego "οἶκος" (oikos), que se refiere a una "casa" u "hogar", y del griego "φαγεῖν" (phagein), "comer".

En este caso "eco" es de ecología, por lo tanto el término se construye como "comer el ecosistema".

No confundir la ecofagia con el acto de comer alimentos ecológicos o provenientes de prácticas sostenibles.

Historia del término[editar]

Aunque ya había ejemplos de esto mismo en la ficción hace muchos años, el término fue inventado por Robert Freitas en el año 2000. Freitas usó el término para describir un escenario en el que la nanotecnología molecular salió mal. En esta situación (llamada el escenario de la baba gris), los nanorobots autorreplicantes fuera de control consumen ecosistemas enteros, lo que resulta en una ecofagia global.

En el artículo en el que Freitas acuñó el término escribió:[r 1]

Quizás el peligro más conocido y más antiguo de la nanotecnología molecular es el riesgo de que los nanorobots autorreplicantes capaces de funcionar de forma autónoma en el entorno natural puedan convertir rápidamente ese entorno natural (p. ej., "biomasa") en réplicas de sí mismos (p. ej., " nanomasa") a nivel mundial, un escenario al que generalmente se hace referencia como el "problema de la baba gris", pero quizás más correctamente denominado "ecofagia global".

Uso general[editar]

La palabra "ecofagia" se podría aplicar de manera más general en referencia a cualquier evento (guerra nuclear, la propagación de un monocultivo, extinciones masivas de especies) que pudiera alterar fundamentalmente el ecosistema de un planeta. Estos eventos resultarían en un ecocidio o en un reemplazo de un ecosistema por otro, ya sea un mecosistema, un entorno árido, un ecosistema exótico u otros. El nuevo ecosistema podría socavar la capacidad de regeneración ambiental y reducir la biomasa e interactividad o sustituirla por otra tipo de actividad.

Otros sugieren que eventos más mundanos y menos espectaculares, como el crecimiento implacable de la población humana, la constante transformación del mundo natural por parte de los seres humanos y eventos similares, darán como resultado un planeta que es considerablemente menos vibrante. Si esta falta de variedad poblacional no se remedia, el planeta será más frágil, menos regenerable, y a excepción de la especie imperante, en este caso los humanos, esencialmente un planeta sin vida. Las personas que apoyan esta teoría creen que la trayectoria humana actual nos pone en un camino que eventualmente conducirá a la ecofagia.

Causas y consecuencias[editar]

Causas:

  • Actividades antrópicas insostenibles.
  • Explotación excesiva de recursos naturales.
  • Reproducción o proliferación descontrolada.
  • Falta de regulaciones ambientales adecuadas.

Consecuencias:

  • Alteración de los ecosistemas.
  • Pérdida o sustitución de biodiversidad.
  • Desequilibrio en las cadenas tróficas.
  • Disminución o sustitución de recursos naturales.
  • Degradación del suelo.
  • Disrupción de los ciclos biogeoquímicos.

Casos genéricos en la ficción[editar]

A continuación se presentan casos genéricos de agentes que podrían hacer ecofagia en la ficción. La ecofagia no se limita a estos casos y podrían encontrarse o crearse obras con casos no incluidos en esta página. Los ejemplos pueden pertenecer a varios tipos o ser una combinación entre estos.

Tipos de organismos que podrían hacer ecofagia[editar]

Máquinas consumiendo un ecosistema.
  • Devoradores de biomasa: Estos organismos son capaces de consumir grandes cantidades de biomasa de manera voraz. Pueden ser criaturas gigantes con mandíbulas enormes o microorganismos que se propagan rápidamente, despojando a los ecosistemas de su vegetación y recursos naturales.
  • Especies parasitarias simbióticas: Estos organismos establecen una relación simbiótica aparentemente benigna con otras especies, pero a medida que se multiplican y se expanden, se vuelven depredadoras y consumen los recursos del huésped. Podrían ser plantas parásitas que agotan los nutrientes del suelo o insectos que colonizan a otros organismos y los debilitan.
  • Organismos devoradores de energía: Estos seres se alimentan directamente de la energía de los ecosistemas. Pueden absorber la luz solar o las corrientes eléctricas del ambiente, privando a las otras formas de vida de la energía necesaria para sobrevivir. Su presencia provoca un deterioro rápido de los ecosistemas y la incapacidad de las especies nativas para mantenerse.
  • Organismos miméticos destructivos: Estos organismos tienen la capacidad de mimetizarse con su entorno de forma casi perfecta, lo que les permite infiltrarse en los ecosistemas sin ser detectados. Una vez dentro, revelan su verdadera naturaleza y consumen los recursos del ecosistema, desplazando a las especies nativas y alterando el equilibrio ecológico.
  • Plagas tecnológicas: Estos organismos son una manifestación de la tecnología descontrolada. Pueden ser nanorobots o criaturas cibernéticas que se multiplican y devoran los recursos naturales a medida que se propagan. Su capacidad de adaptación y su interconexión pueden hacer que sean extremadamente difíciles de controlar y erradicar.

Tipos de ecosistemas que podrían hacer ecofagia[editar]

Baba gris consumiendo un ecosistema.
  • Bosques devoradores: Estos ecosistemas se componen de árboles y plantas que producen una alta competencia y que tienen un apetito insaciable. A medida que crecen, extienden sus raíces y ramas de manera agresiva, devorando y desplazando otras especies vegetales y agotando los recursos del suelo.
  • Desiertos voraces: En estos ecosistemas desérticos, la arena misma se convierte en un organismo depredador. Puede tomar la forma de dunas que se mueven y engullen todo a su paso, o incluso arenas movedizas que tragan a quienes se aventuran en ellas, consumiendo cualquier forma de vida que encuentren.
  • Mares insaciables: Estos ecosistemas acuáticos se caracterizan por la presencia de organismos marinos depredadores que se alimentan de forma desenfrenada. Podrían ser peces gigantes, criaturas marinas míticas o incluso formas de vida submarinas desconocidas que devoran y diezman las poblaciones de otras especies marinas.
  • Praderas engullentes: Estos ecosistemas aparentemente pacíficos son en realidad trampas mortales. La vegetación de las praderas tiene la capacidad de moverse y capturar presas, como animales herbívoros o incluso humanos, consumiéndolos gradualmente para satisfacer sus necesidades nutricionales.
  • Selvas asfixiantes: Estos exuberantes ecosistemas tropicales tienen una peculiaridad mortal. Plantas epífitas o enredaderas que cubren los árboles y estrangulan su crecimiento, impidiendo que otras especies puedan sobrevivir y prosperar. El espeso follaje y la competencia por la luz solar resultan en una ecofagia que altera drásticamente el equilibrio del ecosistema.

Elementos y compuestos que podrían hacer ecofagia[editar]

Estos pueden ser elementos químicos, compuestos inertes, protomateria, materia exótica o cualquier tipo de compuesto. Este grupo se delimita en que no son organismos.

  • Cristales acumuladores: Estos cristales poseen la propiedad de absorber la energía y los recursos a su alrededor. Estos recursos pueden producir en algunas ocasiones que las cristales aumenten. A medida que crecen, se expanden y se alimentan de otros minerales y elementos cercanos, cubriendo el paisaje del mismo color.
  • Elementos disolventes: Estos elementos químicos tienen la capacidad de disolver y descomponer otros elementos y compuestos a su alrededor. Su presencia en el entorno provoca una ecofagia química, ya que disuelven y desintegran las estructuras moleculares de los materiales circundantes. Si se integran en el ciclo del agua pueden recorrer grandes distancias con la lluvia e ir dejando un rastro de disolución y deterioro.
  • Enzimas y corrosivos: Estos compuestos pueden corroer y consumir metales, aleaciones, materia orgánica y otros compuestos con los que entran en contacto. Dependiendo de su composición pueden descomponer y transformar estos compuestos en más sustancia corrosiva.
  • Minerales parasitarios: Estos minerales pueden anclarse a otras formaciones rocosas o depósitos de minerales valiosos y extraer sus componentes vitales. A medida que se alimentan de los recursos, dejan los yacimientos agotados y sin valor, consumiendo gradualmente los minerales y recursos circundantes.
  • Polímeros replicadores: Son compuestos con la capacidad de descomponer y consumir otros materiales poliméricos. Mediante la descomposición y polimerización pueden sintetizar más copias. A medida que se propagan, se alimentan de plásticos y otros materiales similares, descomponiéndolos y reduciéndolos a componentes más simples.
  • Sustancias de absorción vital: Estas sustancias pueden ser un compuesto o un elemento capaz de absorber y aprovechar la energía vital de los organismos vivos. Pueden ser sustancias sólidas, líquidas o gaseosas y se pueden adherir a los seres vivos y drenarlos gradualmente de su vitalidad.

Individuos o sociedades que típicamente hacen ecofagia[editar]

Devorador de mundos consumiendo un ecosistema.
  • Cazadores de almas: Estos individuos tienen la capacidad de absorber y consumir la esencia vital de otros seres, dejándolos sin energía y al borde de la muerte. Utilizan su capacidad para nutrirse de las almas para fortalecerse y prolongar su propia existencia, dejando un rastro de ecofagia a su paso.
  • Devoradores de mundos: Estos seres son entidades cósmicas que viajan de planeta en planeta, consumiendo los recursos naturales y absorbiendo la energía vital de cada mundo que encuentran. Poseen una insaciable sed de poder y pueden ser representados como gigantescas criaturas o como entidades etéreas capaces de drenar la vida misma de un planeta.
  • Egoformadores y terraformadores: Ya sean solitarios, especies o sociedades, estos seres buscan reemplazar el ecosistema de un planeta o región por el ecosistema de su planeta o región natal. Esto puede ser con tecnología, soltando drones, maquinas autónomas, gases, bombardeando con misiles o mediante técnicas biológicas.
  • Entidades absorbedoras: Ya sean elementales, robots, tornados vivientes, masas orgánicas, espíritus iracundos, vampiros, villanos poderosos u otra cosa, estos individuos son singulares. Pretenden hacerse más poderosos absorbiendo el entorno, comiéndoselo o usarlo para repararse o reemplazar sus piezas perdidas.
  • Parásitos psíquicos: Estos individuos poseen habilidades psíquicas que les permiten conectarse y alimentarse de la mente y la energía de otros seres. A medida que consumen los pensamientos y emociones de sus víctimas, crecen en poder y control, dejando a sus presas debilitadas y vacías.
  • Señores del caos: Estos individuos están imbuidos de un poder oscuro y corruptor. A medida que crecen en poder, generan una aura destructiva y distorsionada a su alrededor, que altera y consume el equilibrio de los ecosistemas cercanos. Su influencia y sed de poder pueden llevar a una ecofagia que se extiende más allá de los límites físicos, afectando a la flora, fauna y hasta la misma estructura del mundo en el que se encuentran.
  • Vampiros de energía: Estos seres se alimentan exclusivamente de la energía vital de otros individuos. Pueden absorber la fuerza vital, la vitalidad o incluso la electricidad de sus víctimas, dejándolas exhaustas y debilitadas. Su necesidad constante de consumir energía puede conducir a la ecofagia en comunidades enteras.

Ejemplos[editar]

Lista en orden alfabético.

Realidad[editar]

  • La deforestación indiscriminada que destruye hábitats naturales y altera los ecosistemas locales.
  • La contaminación del agua por eutrofización, proliferación de algas y otros organismos o actividades industriales que afecta la vida acuática y los ecosistemas ribereños.
  • "Silent Spring" (Primavera silenciosa) (1962), ensayo ambiental de la autora Rachel Carson. Obra de no ficción que advierte sobre los peligros de los pesticidas y la degradación del medio ambiente. Para muchas personas, el primer libro divulgativo sobre impacto ambiental y un clásico de la concienciación ecológica.

Ficción genérica[editar]

Microorganismos[editar]

Microorganismos desconocidos, congelados y reanimados, creados en laboratorio, cepas alienígenas, virus, hongos o cualquier tipo de peligro biológico.

Plaga gris[editar]

La plaga gris se refiere a un hipotético escenario de fin del mundo que involucraría la nanotecnología molecular. Según esta hipótesis, un conjunto de nanobots se autorreplicarían sin control consumiendo toda la materia orgánica en la Tierra, materia que emplearían para crear y mantener más nanobots. Este es, efectivamente, un escenario de ecofagia, pues el ecosistema es removido o reemplazado por completo por un agente ¿vivo? invasor.

Imontegaverso[editar]

Milegu[editar]

Ficciones externas[editar]

Lista en orden alfabético. Ver también: Anexo:Lista de ejemplos de Ecofagia en la ficción.

Elementos y compuestos[editar]

Especies y seres grandes[editar]

  • En ciertas versiones de La Guerra de los Mundos (original por H.G. Wells), la invasión alienígena busca transformar la biósfera terrestre para acomodar sus propias formas de vida.
  • Los Tiránidos de Warhammer 40.000 roban genes de manera similar a los zerg, pero su objetivo final es consumir toda la materia orgánica en una galaxia. Su mente-enjambre se encuentra en el Warp.
  • Los Zerg de la saga StarCraft asimilan la genética ("esencia") de otros organismos para desarrollar especies funcionalmente similares como parte de su Enjambre.

Individuos[editar]

  • Marvel Comics X-Men. El día de las otras luces / The Day of Other Lights y La luz que se apagó / The Light that failed (Volumen #246 y #247 de la Imposible Patrulla-X) de julio/agosto de 1989. En estas, el personaje de Molde Maestro usa ecofagia y otras capacidades para repararse.

Nano y micro[editar]

  • The Andromeda Strain (La amenaza de Andrómeda) (1969). Libro de Michael Crichton donde un virus de rápida evolución consume muchos tipos de moléculas orgánicas. Esta historia cubre a la vez la plaga gris y el escenario de virus fuera de control.
  • Annihilation (Aniquilación) (2014), ciencia ficción del autor Jeff VanderMeer. La primera entrega de la trilogía "Southern Reach" presenta una misteriosa Zona X, un territorio invadido por una extraña fuerza que transforma y destruye el ecosistema de formas desconocidas. Cuenta con fenómenos físicos, psíquicos y una organización de hongos y microorganismos desconocidos.
  • Autofac (1955). Relato de Philip K. Dick acerca de máquinas que se autorreplican.
  • Blood Music (Música en la sangre) (1983). Título de Greg Bear donde una forma de plaga gris se produce a partir de linfocitos humanos.
  • Ciemność i Plesń (Oscuridad y Moho), (1959). Obra de Stanisław Lem donde esporas de una forma de vida artificial que puede usar energía nuclear escapan del laboratorio.

Véase también[editar]

Referencias[editar]

Las Referencias aluden a las relaciones de un artículo con la "vida real".

⚜️[editar]

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   Artículo original de Imontegav
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   Artículo original de Avengium
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   Artículo en colaboración con NimoStar
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