Ave del tamaño de la codorníz, que en la cabeza se parece à la golondrína, y en las alas à la garza. Carece totalmente de pies, es mui hermosa, porque tiene las plumas de la cerviz amarillas y resplandecientes como el oro, las de las alas entre roxo y negro, y las del pecho turquesadas. Cria sobre las espaldas de su mismo compañero, en las quales hai una concavidád mui suficiente para este ministerio. Duerme y descansa sobre otra de su especie, sirviendose reciprocamente. Llamase tambien Ave del Paraíso. Lat. Manucodiata avis[b 1].