Lírica:Vil caída

De Bestiario del Hypogripho
Revisión del 23:32 1 oct 2022 de Jakeukalane (discusión | contribs.)
(difs.) ← Revisión anterior | Revisión actual (difs.) | Revisión siguiente → (difs.)
Vil caída, por Jakeukalane.

   Este artículo se compone de contenidos creados por Jakeukalane.  Este artículo está ilustrado con imágenes de Jakeukalane, ninguna otra persona, ningún autor adicional y nadie más. 

¡Locos!¡Locos!
Todos están locos.
En la villa el alcalde rompe hojas sin pensar…
no hay savia en los árboles,
ya no existirán.
Podredumbre en las aceras, carpas de metal,
domadores extraños y bestias amargas vendrán.
Nadie entiende nada.
El descampado. No entres, allí merodea
el Asfaltador. Dicen que asesino fue, pero cierto no era:
sólo enterraba maletas de recuerdos llenas.
Su trabajo era
duro, su afición le entretenía.
La apisonadora un día
se salió de la calzada
y chocó contra la profunda acera.
Su novia dicen que tuvo que enterrar, víctima desafortunada.
Ahora se siente desgraciado, nunca lo dijo
pero ve ojos en los vasos.
Con sus maletas
merodea en el descampado.
¡Hija, no vayas ahí! Gritaba una señora,
la niña le dijo: Pero…

Murmullos en las esquinas desconchadas,
piensa en el alcalde, piensa en la niña fría, piensa;
piensa en el Asfaltador enterrando una maleta.
No hay dinero en el pueblo, todo el mundo lo sabe,
pero nadie mejor que su querido alcalde.
La fiesta del pueblo no se podrá celebrar,
y dicen que han encontrado un lobo seco en el río.
Su pelaje estaba intacto, pero sólo eso.
Algo le quitó la carne, algo y desde dentro.
Las hojas caen desordenadas desde la ventana pintada. Loco
está el alcalde, locos
están los sapos.
Loca está la veleta de debajo del tejado.
No vendrán bestias amargas, no
las pagaron, los árboles ya no existen, tendrán que replantarlos.
Mente despierta y mente fría se reúnen bajo el puente,
discuten
de como librarse del cuerpo aún caliente.
Susurrando deciden tirarlo al río. El río y el río.
A la mañana siguiente la niña fría grita
desesperada por una amistad perdida.
El Asfaltador ha muerto sin una despedida.

Lágrimas y pelos golpeando las calles.
Las tormentas no vienen,
la muerte viene sola.
Los enemigos del amigo de la niña
se pasean por el barrio. El alcalde suicidado, nadie lo creía.
Pero ya dijo el padre
hará un mes,
poco le queda a nuestro querido alcalde.

Los lobos invaden el pueblo, quieren vengar a alguien.
El lobo seco reposa,
no, no reposa, está
clavado a la pared como trofeo en la casa,
en la casa de las mentes frías.
Ensayos de cartas de suicidio por la habitación,
los lobos entraron.
Ropa empapada
en la esquina,
los ansiosos lobos se acercan
a los asesinos. Enfermedades graves se encuentran
en el fondo de un pequeño río.
Frena el coche y baja a ver la niña fría,
una comilona, una carnicería
a los carniceros malditos.
Lobos saciados,
fiesta en el pueblo.
Los árboles
existen de nuevo.
¡Locos! ¡Locos! Todos siguen locos.

Menos Asfaltador, su lobo seco y marchito, el alcalde y esos dos, cansados,
viejos, marchitos y muertos asesinos
.

⚜️[editar]

Logo Generación Propia.png Este artículo es un poema trasladado desde Generación Propia. Su ubicación es la siguiente: Vil caída
Logo Deviantart.png Este artículo es una copia textual y tiene una versión en la galería de deviantart de Jakeukalane. Puedes ayudarlo añadiendo información e imágenes desde la desviación. Su ubicación es la siguiente: Vil caída (rima experimenta)
Hypogripho transcripción.png
Este artículo es una copia textual reformateada
de un artículo en el blog de Cosasabsurdas.
Puede encontrarse en:
Vil caída
Vil caída.png
Este artículo está inspirado por la imagen siguiente:
Vil caída
No posee ninguna relación canónica con ello.

Icon inspiración.png

 Avatar Jakeukalane.png  Artículo original de Jakeukalane
Para proponer cualquier cambio o adición, consulte a los autores.
Icon pluma dorada 1.png