Lírica:6996 Espejos

           

Había un espejo que debía llevar, perteneciente a un muerto. Un espejo donde había visto sus drogadicciones y sus VIH. Un espejo que quizás lo habría visto matarse, morir.
En la vida todo está dado vuelta, cabeza abajo, espejado. El espejo gira y gira como una ruleta pero seguimos parados igual; como el espejo solo refleja lo que somos -o lo que parecemos- el espejo redondo e indiferente no gira visiblemente, porque siempre lo vemos como nosotros... ¿Alguna vez vimos nuestra propia vista dada vuelta? No; quizás podemos ver todo dado vuelta, menos nuestra propia vista.
Camino arriba-abajo por los techos y me parece que yo estoy bien, que el mundo está mal. Trato de bajar hasta la terraza de la inmensa edificación de muertos, de este tenebroso termitero mortuorio humano que la humanidad misma ha dado por alquilar, irónicamente, bajo el nombre inverso de "viviendas". Al llegar al piso más bajo, es decir el último, que debería apuntar a las estrellas, solo hay puertas cerradas.
¡Cómo quisiera romper estos espejos! ¡Cómo quisiera que el infierno no se extendiera arriba! Y hay que ascender a él, demostrarse merecedores de que el Diablo nos haga una oferta, porque, ¿Quién no la tomaría? Nos pide solo una cosa, y a cambio nos da todo, ¡De qué generoso modo! Tras cada uno de los niveles espirales del marketing, y subir muchas posiciones en la jerarquía, para conocer al inverso espejo del mesías... nos daremos cuenta de que hace mucho que perdimos el alma, y que ya no nos queda nada para negociar. Y este demonio infame y famoso, que reside en el más alto, cálido y luminoso de los nueve círculos verticales del Averno, se alza con sus alas sobre todos nosotros y gobierna fotogénico y sonriente sobre la totalidad de la existencia.
Tomé la maza, dispuesto a filosofar estos espejos a martillazos; demolí las paredes del termitero, rompí sus columnas ilimitadas con la fuerza limitada de mi columna rota; arranqué del suelo las vigas e hice que cayeran ligeras las piezas hacia arriba... Para que aplasten al Diablo, para que floten y rompan como piedras de protesta los nueve vidrios espejados del penthouse Infierno, vidrios engañosos detrás de los cuales observa temeroso el ojo acosador de aquel que se hace llamar "El todopoderoso".
De entre los fragmentos surgió enterrado mi brazo, mi mano aun firmemente tomando el mazo.
Todavía quedaban 6995 espejos.

Serie de los Espejos

• 7000 Espejos
• 6999 Espejos
• 6998 Espejos
• 6997 Espejos
• 6996 Espejos
• 6995 Espejos
• 0081 Espejos
• 0004 Espejos

⚜️

	Artículo original de NimoStar Para proponer cualquier cambio o adición, consulte a los autores.

06/04/2022 22:41 hs